Karoll Piza, Organización Colombiana de Estudiantes –OCE- Universidad Distrital, Bogotá 5 de Septiembre de 2012.
Mil ochenta y cuatro investigadores, en el llamado “desespero de la comunidad científica”[1], acaban de denunciar que el presidente Santos le sigue haciendo conejo al país, con una lesión profunda al avance en la ciencia, uno de los pilares del desarrollo de las fuerzas productivas.
La inversión para la investigación en países como Estados Unidos es del 2.7% del PIB, en Argentina del 0.40% y en Sudáfrica de 0.93%, mientras que Colombia invierte el 0.18%. La producción científica que Colombia le aporta al mundo es del 0.20% y del 5.04% en la región (4.278 documentos), pero casi la mitad se da en el marco de colaboraciones internacionales, en comparación con Argentina, que aporta mundialmente el 0.45% y a Latinoamérica el 11.48%, con 9.739 documentos. China aporta 14.78% de la investigación mundial, un equivalente a 320.800 artículos. Las cifras hablan por sí solas.
Es claro que la investigación requiere fuertes sumas de dinero, que solo pueden ser sostenidas por el Estado. Es una inversión necesaria, pues para investigar no se requiere sólo comprender el mundo, sino también producir un conocimiento que logre transformarlo, a fin de superar las condiciones de atraso de nuestro país. Se necesita también una estructura seria que distribuya y administre, en nuestro caso, el Departamento de Ciencia, Tecnología e innovación, COLCIENCIAS. Infortunadamente, la entidad sufre una crisis histórica, porque se ha venido adaptando la producción en investigación a los Tratados de Libre Comercio, y la economía colombiana a la locomotora minero-energética, puesta al servicio de las multinacionales y del capital financiero.
No es extraño que coincidan el pronunciamiento de más de mil investigadores y la lucha de la Mesa Amplia Estudiantil. Hasta el ministro de Ambiente, Frank Pearl, debió reconocer: “Es más fácil obtener un título minero que una autorización para investigar”. A espaldas de la población colombiana, de los estudiantes y ahora de los investigadores, Santos les hace conejo al país, a la educación y a la investigación, una razón más para salir a las calles esté 5 de septiembre. “Si el gobierno le hace conejo al país, nosotros, con la MANE en las calles, a construir”.
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